Isolina Maffei (Monica Vitti) es una joven acomplejada, introvertida y temerosa. Su aversión a los hombres se debe al único encuentro que ha tenido con un representante del sexo opuesto: habiendo huido del convento para seguir a un hombre, se encuentra tras unos meses de vida matrimonial, sola y sin dinero. Uno de los muchos asesinatos, la prostituta habitual encontrada muerta, lleva a Isolina a los titulares. Ella jura que vio a Marino Bottecchia (Ugo Tognazzi), el proxeneta de la víctima, en la escena del crimen. El proxeneta es condenado a veinte años de cárcel. Al cabo de unos meses, Isolina se da cuenta de que ha confundido un día con otro en su «declaración de supertestigo»: Marino Bottecchia es, por tanto, inocente. Durante el juicio de apelación, el acusado es absuelto de asesinato, pero condenado a tres años por proxenetismo. Isolina aún no tiene la conciencia tranquila y quiere ayudar al hombre a redimirse: se ven cada vez más a menudo en la cárcel y, finalmente, deciden casarse. Una vez saldada su deuda con la sociedad, Marino jura empezar una nueva vida con su compañera. Pero después de intentar de mil maneras una colocación aceptable, y fracasar, ¿cómo puede desistir de la tentación de convencer a Isolina para que haga el «intercambio»?
La supertestimone es una mezcla perfecta y curiosa de drama judicial con denuncia de la terrible vida carcelaria, comedia ácida como una película de Ferreri de los años sesenta, con desenlaces imprevisibles. Una competición de bravura entre una Monica Vitti, torturada desde el principio por las dudas y las sospechas, y un Ugo Tognazzi cínico y ambiguo, nunca exagerado
Fuente
Género: comedia drama
Reparto
Monica Vitti: Isolina Pantò
Ugo Tognazzi: Marino Bottecchia
Orazio Orlando: jefe de alcaides
Véronique Vendell: hermana de Isolina
Filippo De Gara: inspector
Banda sonora Luis Bacalov
